La Hermandad presentó ayer el diseño de José Delgado para la coronación canónica
La Hermandad de la Redención de Sevilla presentó ayer en la iglesia de Santiago el nuevo proyecto de presea para la coronación canónica de María Santísima del Rocío.
El diseño, realizado por D. José Delgado, se basa en la advocación de la Virgen: "La festividad litúrgica del Rocío se celebra el primer lunes de pentecostés, cincuenta días después de la resurrección del Señor de la Redención del hombre y centro del cosmos y la historia, Él se sacrificó para rescatar a los hombres de la esclavitud del pecado. El significado en la biblia de Rocío es bendición de Dios y renovación espiritual, una advocación universal que también significa la temprana gracia que refresca el espíritu con su eterna juventud".
La corona se divide en dos partes claramente diferenciadas. Por un lado, el canasto y, por el otro, el resplandor. El primero es el que se posa sobre las sienes de la Santísima Virgen como Reina del Cielo y la Tierra.
El resplandor, que simboliza la luz divina, es circular con doble aro. En el aro exterior, remata su centro la cruz que simboliza la victoria de Cristo sobre la muerte y el pecado. Esta cruz está inspirada en la de Santiago, sede de la corporación, proyectada con adornos barrocos y pedrería de amatistas, dándole así un toque morado que representa la preparación espiritual, la penitencia, la cuaresma y la vigilia. Esta cruz nace de una cartela con el anagrama de la Virgen María, realizada con pedrería turquesa.
En el aro exterior, doce cartelas con los doce apóstoles repujados. En la parte superior de estas cartelas, nacen pebeteros con llamas en puntas, significando que todos y cada uno de ellos fueron llenos de Espíritu Santo.
Esta parte queda culminada con doce estrellas de seis puntas que simbolizan las doce tribus de Israel. Todo el conjunto queda a base de rayos flamígeros y plisados por todo su exterior.
El aro que soporta todo este conjunto está decorado con la flor de lirio o azucena, intercaladas con doce cartelillas con piedras de amatista. En la parte interior, el coro de ángeles de adoración con las cabezas ebúrneas en un total de diez, por los Mandamientos.
Al ser una corona a dos caras, en la parte posterior encontramos doce letanías lauretanas: "Estrella de la mañana", "Rosa mística", "Arca de la alianza", "Espejo de la sabiduría", "Fuente de la salud", "Torre de David", "Puerta del cielo", "Casa de oro", "Refugio de los pecadores", "Reina del cielo", "Madre Inmaculada" y "Vaso espiritual".
En definitiva, podemos concluir que esta presea está inspirada en el momento de Pentecostés como principal catequesis visual.
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